lunes, 11 de octubre de 2010

Pablo De Simone - Primo de Lalo

QUERIDO PRIMO LALO

Muchos son los recuerdos que guardo de vos: tu alegría de vivir cada instante con ese fervor que hervía en tu alma, tu inagotable pasión por la música que vibraba en tu Ser y corría por tus venas; tu cariño inmenso y agradecido por mis viejos: a tu tía Piba que de niño le decías "Tía Mamá" y a tu tío Mario a quien tanto querías y tanto te quería (salvo cuando lo jodías a la siesta con la guitarra).

Muchos, digo, son los recuerdos, pero el más vívido y querido me lleva a mi infancia, una noche, allá en Esquiú, cuando me permitiste acompañarte (prácticamente no me separaba de tu lado) en una habitación de la casa de tus padres, donde te pusiste a componer a la luz de una lámpara de querosén (de esas que había en casa de los tíos, con el tubo ahumado y caliente y la flama quieta). Extasiado, en silencio casi religioso te veía tararear melodías que nacían de tu Musa mientras agitabas la mano en el aire y luego garabateabas signos en el papel pentagramado (signos incomprensibles para ese chico que te miraba). Signos que hoy son mi segunda lengua, lenguaje que me permite conectarme con los Grandes Maestros o plasmar melodías y arreglos hurgando y sacándolos de mi corazón y mi mente.

¡Cuántas veces quise que me oyeras, que me aconsejaras!, que me alentaras en mis primeros pasos, en mi avance hacia obras más complejas; que me apoyaras en mis fracasos y me criticaras en mis logros. Y para decirte que fueron vos y mi tío Ángel quienes me impulsaron, sin saberlo, a seguir esta carrera que vibra en mi Ser y corre por mis venas.

Pero en realidad sí estuviste: cuando me recibí de profesor, cuando toqué por primera vez en público o cuando alguna melodía trata de salir y mi mente quiere darle forma, garabateándola luego en el pentagrama. Vuelvo entonces a aquella habitación de Esquiú, a la derecha del zaguán de la casa de los tíos, y vuelvo a estar sentado y en silencio, a la luz de la lámpara de querosén, junto a mi primo Lalo.

Pablo De Simone

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